El Honorable Concejo Deliberante (HCD) de San Vicente aprobó el Presupuesto Municipal 2026 por $12.880 millones, junto con la Ordenanza General Impositiva, que incorpora nuevos tributos y un incremento generalizado de tasas. El cálculo de recursos logró 6 votos a favor y 1 en contra, mientras que los puntos más sensibles (el tratamiento del superávit y la reforma impositiva) se definieron por un ajustado 4 a 3, reflejando la división interna respecto del impacto fiscal.
Un crecimiento sostenido de las cuentas municipales
El Departamento Ejecutivo administrará la mayor parte de los $12.880 millones previstos para 2026, un monto que mantiene la tendencia ascendente de los últimos años.
En 2024, el presupuesto ajustado fue de $8.220 millones; en 2025, el cálculo inicial ascendió a $10.135 millones, pero fue ampliado hasta superar los $11.200 millones.
Según el Ejecutivo, estas ampliaciones respondieron principalmente a la inflación acumulada, el incremento de la recaudación y la necesidad de sostener servicios esenciales.
El presupuesto del Concejo Deliberante
El HCD estableció para sí mismo un presupuesto de $408.919.383, lo que representa un aumento del 42,83% respecto de 2025.
La mayor parte del gasto corresponde a sueldos y dietas del personal y los concejales, que absorberán $342,4 millones. También se incrementan partidas para bienes de consumo y bienes de capital. La Carta Orgánica habilita al cuerpo a disponer hasta el 6% del gasto total municipal, porcentaje en el que se mantiene.
La Ordenanza Impositiva, el capítulo más discutido
La Ordenanza General Impositiva 2026, aprobada por un margen mínimo, introduce cambios profundos en la estructura tributaria del municipio.
Aumenta la Unidad Tributaria
La Unidad Tributaria (UT) sube de $500 a $625, un incremento del 25% que impactará en casi todos los tributos locales. Además, los rubros con anexos específicos recibirán un aumento adicional del 30%, según la clasificación que determine el Ejecutivo.
Nuevas tasas para obras y grandes generadores de residuos
La normativa incorpora un gravamen del 4% del presupuesto a toda estructura destinada a sostener avisos o letreros de obras. En materia ambiental, se suma una tasa para grandes generadores de residuos no peligrosos (hoteles, restaurantes, supermercados, mercados y shoppings) que deberán abonar 6 UT por metro cúbico que exceda el volumen habitual de un vecino sin actividad comercial. Para residuos especiales (patológicos, peligrosos o contaminantes), la tarifa será de 20 UT por metro cúbico. Todo ésto, quizás, ligado al nuevo proyecto de reciclaje.
Segmentación de comercios y criterios de vulnerabilidad
La ordenanza incorpora una micro-segmentación que impactará sobre pequeños comercios, especialmente los kioscos:
- Kiosco A: 10 UT
- Kiosco B: 20 UT
- Maxikiosco: 40 UT
- Maxikiosco o Polirrubro 24 horas: 300 UT
Además, se fijan criterios para que ciertos negocios puedan ser ubicados en la Categoría B, destinada a contribuyentes con menor capacidad económica.
Entre los parámetros figuran: superficie menor a 20 m², hasta dos empleados, baja facturación y situaciones de vulnerabilidad del propietario. Si hay una obra en construcción la colocación del cartel de obra es obligatorio y tendría un tributo de 10 UT, entre otras tantas novedades.
