Desde la tarde de ayer se busca a Enrique Gabriel Del Roio, un niño de 10 años que desapareció de su vivienda ubicada en Picada Mandarina, una zona rural de la localidad de El Soberbio. Es la segunda vez en el año que el menor se ausenta de su hogar.
El despliegue fue activado tras la denuncia radicada por su madre, Ana María (29), quien se presentó en la Comisaría de la Mujer ayer a las 19:20. Según su testimonio, Enrique tiene antecedentes de ausentarse con frecuencia, casi una vez por mes, aunque en situaciones anteriores regresaba por sus propios medios a las pocas horas. Esta vez, sin embargo, el paso del tiempo y la ausencia de novedades han encendido todas las alarmas.
El niño fue visto por última vez durante la mañana del mismo lunes. Vestía una remera azul de mangas largas, pantalón largo negro y ojotas. Es de tez morena, contextura delgada, cabello corto y oscuro, y de estatura media.
Ante la gravedad del caso, la Jefatura de Policía activó el protocolo de búsqueda especializado. El operativo, supervisado por el Subjefe de la Policía provincial, comisario general Marcos David López Asencio, incluye la utilización de drones equipados con cámaras térmicas, canes entrenados para rastreo, y efectivos de la División Delitos Rurales y de Operaciones Especiales, quienes conocen en profundidad la zona de monte cerrado y caminos de difícil acceso, vecinos alertan haber encontrado rastros de un gran felino en la zona.
La búsqueda se concentra especialmente en el área de Picada Mandarina, a más de 12 kilómetros de la ruta principal, donde fue visto por última vez. También trabajan agentes de la Comisaría local, la Comisaría de la Mujer, División Infantería, Patrulla Motorizada y Comando Radioeléctrico, quienes recorren a pie y en vehículos senderos, chacras, malezas y márgenes de un arroyo cercano.
Cualquier información que ayude a encontrar a Enrique debe ser comunicada de inmediato al 911, 101 o a la dependencia policial más cercana.
