lunes, 12 de febrero de 2024

Murió una Mujer tras Ingerir un Agroquímico en San Vicente

Una mujer de 30 años, identificada como Adriana D.S., perdió la vida este lunes cerca de las 9:30 en el Hospital SAMIC de San Vicente, luego de haber consumido un secante conocido como Geamuxone, un tipo de herbicida, la ingesta entre 10 a 50 ml puede ser fatal para un adulto.

Según la información oficial, se trató de un accidente, pero fuentes extraoficiales indicaron que podría haber sido un acto deliberado. La mujer estaba en pareja y era oriunda de Picada Molino, tenía dos hijas y un hijo menores de edad.

*En la región es común poner agroquímicos en botellas de plástico 

Policía Detiene a Tres Personas que Amenazaban con un Arma en San Vicente

La policía de San Vicente realizó un operativo cerrojo en la madrugada de hoy lunes, luego de recibir denuncias de que una persona en una camioneta Volkswagen Amarok estaba amenazando a los transeúntes con un arma de fuego. El hecho se dió en colectora de Ruta Nacional 14, a pocos metros de la Terminal de Omnibus. El vehículo fue interceptado sobre la avenida Libertador, donde se identificó a sus ocupantes: Yanina F. (30), Ramón B. (39) y Celeste R. (22).

Al revisar a los sospechosos, se encontró que está última llevaba en la cintura una pistola marca Bersa, calibre 22, con cuatro cartuchos en el cargador y uno en la recámara, lista para disparar. La policía secuestró el arma y detuvo a los tres individuos, quienes quedaron a disposición de la justicia.

*Captura del video donde se dio la amenaza 



Intentó Suicidarse con un Rifle tras Discutir con su Padre y Volcar la Camioneta

ACTUALIZADO Martes 13 de febrero: el joven falleció por las heridas sufridas.

Nota original:

Un hombre de 38 años se encuentra en grave estado luego de dispararse en el mentón con un rifle de aire comprimido modificado para usar munición calibre 22. El hecho ocurrió el domingo por la tarde en la localidad de El Soberbio, después de que el sujeto, identificado como Juan Gabriel P.

Según fuentes extra oficiales el hombre había tenido una pelea con su progenitor horas antes, cuando tomó la camioneta de éste y la volcó en la zona del Fisco en horas de la mañana del domingo. Un amigo lo auxilió y lo trasladó hasta la casa de sus padres, ya que vive con ellos. Allí se reanudó el conflicto y Juan Gabriel intentó quitarse la vida con un cuchillo, pero en el forcejeo hirió a su padre. Luego, tomó un rifle que su madre había escondido y se disparó en el rostro.

El mismo fue ingresado al Hospital SAMIC de San Vicente alrededor de las 7:15 de la mañana del lunes, con una herida de bala en el mentón. La policía incautó el arma utilizada, un rifle de aire comprimido marca Himpa, con un cargador y dos cartuchos calibre 22. También se le realizaron pruebas de parafina para determinar si fue el autor del disparo. La causa fue caratulada como “suicidio en grado de tentativa”.

*Imagen ilustrativa 

El Silencio de las Autoridades Ante los Problemas de la Región

La policía tiene el deber de informar a la población sobre las actividades que realiza con los recursos públicos, pero se limita a dar detalles de algunos hechos delictivos que ocurren en la región. En los últimos meses, las autoridades en general parecen haber adoptado una política de silencio y evasión, que dificulta el trabajo periodístico y la transparencia informativa.

De hecho, nuestras últimas publicaciones se basan casi exclusivamente en los testimonios y mensajes que nos envían los propios lectores. En estos tiempos, la policía solo informa sobre las novedades que le resultan favorables, como la resolución de casos, las detenciones o los allanamientos, y se escuda en supuestas órdenes judiciales para no dar cuenta de otros hechos que involucran a la sociedad, diciendo que estos son “delitos o circunstancias de instancia privada”.

Esta actitud deja en la sombra temas que afectan profundamente a la sociedad, como el consumo y el tráfico de drogas, el contrabando, la depresión, los suicidios, el abandono de persona y otras cuestiones que evidencian un momento delicado, donde el estado tiene una gran responsabilidad por su falta de asistencia o acción efectiva.

Fuentes de diversas fuerzas de seguridad, que prefieren mantener el anonimato, confirman que incluso ellos se sienten frustrados por la inacción de la justicia, ya que no da curso a sus investigaciones, pruebas, escuchas o solicitudes de allanamientos. Incluso hablan de persecución interna. La gente, por su parte, comenta cada vez más que “la policía sabe quién es el chorro pero no actúa”, lo que genera una sensación de impunidad e inseguridad.

A esto se suma la sospecha de que en los últimos meses se ha incrementado la participación de uniformados o ex uniformados en presuntos hechos de delincuencia, como el abigeato, el robo, el tráfico o las coimas, lo que implicaría incluso la existencia de zonas liberadas o connivencia con el crimen organizado.

Ante este panorama, el periodismo se enfrenta al desafío de traer o no a la luz lo que pasa y queda a merced de la duda y la especulación, dificultades propias de la profesión, ya que rápidamente aparecen los aprietes, las amenazas y la falta de rentabilidad, lo que obliga a muchos a buscar nuevos rumbos. El resultado es una población cada vez más ignorante de lo que pasa incluso en su propio barrio, lo que favorece la manipulación y el control social. ¿Es esto lo que quieren las autoridades del poder ejecutivo y judicial? Por ahora, solo hay teorías, especulaciones y opiniones, pero se espera que algún día den explicaciones en caso de que todo esto sea cierto.