Los Bomberos Voluntarios de San Vicente presentaron este lunes a la tardecita su nueva adquisición: la unidad N° 23, un Volkswagen 13-180 especialmente adaptado con un tanque de 10.000 litros de capacidad. El vehículo fue recibido con una caravana por las calles del municipio, acompañado por las sirenas encendidas, en un gesto que no solo marcó el orgullo de la institución sino también el compromiso de reforzar la seguridad comunitaria.
El camión, de origen Volkswagen, pertenece a la reconocida línea 13-180, equipada con un motor diésel MWM de seis cilindros en línea con turbo e intercooler, capaz de entregar cerca de 173 caballos de fuerza y un par motor de 600 Nm, lo que le permite transportar grandes volúmenes de agua con estabilidad. Dispone de una caja Eaton de cinco velocidades sincronizadas, sistema de frenos neumáticos de doble circuito, dirección hidráulica integral y ejes reforzados que lo vuelven apto para maniobras exigentes en terrenos urbanos y rurales.
El chasis, diseñado para trabajos pesados, fue reforzado con la instalación de la cisterna de acero, cuya capacidad de 10.000 litros supone un incremento fundamental en la capacidad operativa de los bomberos locales. Este volumen de agua permitirá dar respuesta en incendios forestales y estructurales de gran magnitud. A ello se suman accesorios de bombeo, válvulas de carga y descarga, conexiones rápidas y escaleras de acceso, equipamiento indispensable en emergencias.
Según datos técnicos, el vehículo alcanza una velocidad máxima cercana a los 90 kilómetros por hora y mantiene una buena performance en pendientes, aunque por su tamaño y peso requiere especial atención en la conducción urbana. Su peso bruto total ronda los 13.200 kilos, cifra que contempla la carga de agua y los equipos adicionales. La robustez del chasis y la distribución del peso en la cisterna son clave para garantizar estabilidad y seguridad durante las intervenciones.